RESPUESTA AL DR. RAÚL ALFONSÍN SOBRE SU AGRESIÓN VERBAL

A LA DRA. ELISA CARRIÓ

Dr. Diego Barovero*

Pertenezco por razones etáreas a la generación que se incorporó a la vida política con el renacimiento democrático inaugurado por Raúl Alfonsín. Soy afiliado radical hace casi veinticinco años. Siempre he admirado y sido solidario con el ex presidente, fundamentalmente en lo que atañe a la transición democrática, aún en los aspectos más controvertidos de su gestión.

Ello no obstante, debo repudiar una reciente actitud suya, a todas luces contradictoria con los principios y valores que como demócrata cabal él supo transmitir a la sociedad argentina toda. Me refiero al brutal e injusto ataque verbal que en los últimos días de esta anodina campaña electoral que vivimos los argentinos ha proferido contra la doctora Elisa Carrió.

Me parece necesario en principio destacar que Carrió hace política porque fue Alfonsín quien la incorporó a la actividad, haciéndola primero convencional constituyente en 1994 y luego diputada nacional sin que aquella tuviera trayectoria militante.

El vituperio al que fue sometida Carrió por parte del ex presidente, calificándola de "antirradical", "hipócrita" y "desequilibrida" constituye un agravio innecesario para con alguien con quien alguna vez se compartió un espacio de ideas, conductas y principios como el radicalismo. La virulencia verbal del ex presidente dedicada a una ex correligionaria, pudo haber sido digna de mejor causa si hubiese dedicado algún párrafo alguna vez a condenar al peronismo en sus diversas figuraciones y desfiguraciones, auténtico responsable del deterioro moral, material e institucional argentino de los últimos sesenta años-

La razón tal vez se encuentre en el enojo e irritación que le produce a Alfonsín la constatación del pobre registro de adhesiones de su candidato peronista Roberto Lavagna, repudiado por vatos sectores del radicalismo (los K, los que se fueron con Carrió o los que sostuvimos la necesidad de llevar candidato presidencial radical). La responsabilidad de haber sido artífice del lento pero constante desgaste del radicalismo a partir de estrategias políticas y electorales erróneas que implicaron importantes claudicaciones como el Pacto de Olivos con Menem, la Alianza con el Frepaso, la candidatura presidencial de Fernando de la Rúa, el apoyo a Eduardo Duhalde que fueron mellando inexorablemente la credibilidad de un partido de principios como la UCR . El dramático deterioro electoral del radicalismo desde 1983 en que supimos cosechar el 52% de las voluntades ciudadanas hasta 2003 en que terminamos en el registro más bajo en un siglo de historia: el 2% de la mano de otro candidato presidencial que contó con la bendición alfonsinista.

Aún sin haberla votado en 2003 cuando fue candidata a presidente, sin ser afiliado ni simpatizante del ARI ni de la Coalición Cívica y sin coincidir con muchas de sus posiciones ideológicas, considero a Elisa Carrió más cercana a la auténtica tradición radical, con sus valores, conducta y principios que muchos que escudados en su condición de "afiliados" han tenido actitudes rayanas en la apostasía doctrinaria.

Nada más alejado del verdadero radicalismo, el de Alem, Yrigoyen, Alvear, Lebensohn, Larralde, Illia y Balbín que la actual conducción de tinte stalinista que reparte expulsiones con pompa inquisitorial; que consagra un candidato extrapartidario violentando normas partidarias y procedimientos de democracia interna; que vulnera la autonomía de los distritos con intervenciones ilegales amparadas por la jueza "que cubría".

La injustificable agresión verbal de Raúl Alfonsín encontrará sin dudas respuesta de miles de ciudadanos radicales que el domingo 28 de octubre, con dolor por la desnaturalización y envilecimiento de la vieja y gloriosa UCR, pero con convicción en la necesidad de restablecer sus principios liminares orientados a la reconstrucción de la república democrática, en el cuarto oscuro honraremos la historia radical sufragando por la Dra. Elisa Carrió para presidente de la Nación.


*Vicepresidente Instituto Nac. Yrigoyeneano
-Convencional UCR Ciudad Autónoma de Bs. As.